lunes, 23 de mayo de 2011

Las pajas de mi vecino

Estoy seguro que esta vez, mi vecino me ha descubierto y está haciéndome el homenaje de pajearse en mi presencia. Es que la última vez que lo capturé por la ventana cómplice de la cocina de mi apartamento, sentí que de alguna manera, estaba haciendo cosas más elaboradas que antes y disfrutaba enormemente con esta paja, que de las varias que le he visto, puedo asegurar fue una de las mejores. Yo no le estaba buscando; ese día, hace como una semana y media, llegué a casa y estaba muy cansado del trabajo, mis planes entonces, consistían en darme una ducha tibia y larga y acostarme temprano. Entré a la cocina a tomar agua y vi la luz encendida en su sala, no me asomé de primer intento, pero escuché un ruido leve, como el crujir de un sofá y eso me despertó un morbo raro que me llevó directo a la ventana, como tantas otras veces. Allí estaba él, vestido con una camiseta y un boxer, sentado en el medio del sofá mirando la tele y empezando a sobarse suavemente el paquete. Desde ese momento me quede pegado a la ventana por un buen rato.... Poco a poco empezó a tocarse la cabezota que salía del interior, pasando sus dedos medio e índice alrededor y mojándolo con su saliva que ponía directamente de la boca a sus dedos y de ahí a su guevo, que estaba empezando a pararse y ponerse muy duro. Estuve viéndolo por algunos minutos. Él no miraba a la ventana, pero no hacia nada por evitar ser visto, aunque nunca sabré, si sabe que yo lo miro con frecuencia. Entonces se quitó el boxer, sacudió un poco su instrumento, ese magnífico machete que yo conozco bien de tanto verlo y deseo muchisimo. Lo agarró con su mano derecha y empezó suavemente a moverlo de arriba a abajo con un movimiento uniforme, mientras en su cara podía ver los gestos de un deseo que poco a poco, iba logrando satisfacción y gusto. De pronto se levantó del asiento, se quitó la camiseta y se instaló de nuevo en el sofá completamente desnudo...

Lo que pasó a continuación me dejó completamente anonadado, y me puso a millón. No pude evitar imitarlo inmediatamente. Me quité la poca ropa que llevaba puesta y empecé a frotarme al mismo tiempo, no necesitaba nada más que verlo para gozarme esa cosa estupenda que él estaba haciendo: había levantado las piernas y, abriéndolas en el aire, comenzó a poner sus dedos, con timidez primero, pero luego con bastante determinación, en el rico agujero que por primera vez se develaba ante mis ojos. Es un huequito pequeño, estrecho y rodeado de una fina pelambre que poco a poco, comenzó a dar paso al encuentro con sus dedos lubricados por la babita que salía de su guevo y por su saliva. Pude ver entonces, como su palote se ponía cada vez más y más duro, él lo agarraba con la mano libre y apuraba los movimientos con ritmo acompasado y cada vez más fuerte.
Entonces sucedió lo que ambos queríamos: Un recio chorro de semen bañó su pecho casi sin aviso, produciéndole espasmos de placer, que lo hicieron estirarse en el sofá para mostrar en su esplendor cada músculo de ese cuerpo delgado y bien entrenado, que tantas noches de gozo me ha brindado.
Casi al mismo tiempo yo mojé el mostrador de mi cocina, en un orgasmo buenísimo que, aunque parezca lo contrario, tuvo su compañía entera.

Estoy pensando seriamente que muy pronto, tocaré la puerta de su casa y le ofreceré lo mejor de mis habilidades. No puede ser que ese mangazo siga pajeandose sólo y nunca haya metido en su casa quien le ayude a pasarlo mejor. Creo que por ahora, lo haré yo.

3 comentarios:

  1. Avísanos por favor lo que pasa con tu vecino

    ResponderEliminar
  2. Cuando era niño y salíamos a jugar al campo, mi hermano mayor y otro chico se pajeaban y se mataban de risa mientras lo hacían, yo los miraba pero no participaba, me avergonzaba hacerlo delante de ellos, han pasado muchos años desde aquello, ahora soy viejo y creo que una de las cosas que mas me gustaría disfrutar, es que un macho bien guapo, grandote, musculoso,bien peludo y con una fabulosa verga parada, se plantara frente a mi y se hiciera una tremenda paja, terminando con profundos quejidos de placer, creo que lo disfrutaría muchisimo.

    ResponderEliminar
  3. cojeme y sabras lo q´ se siente!!te lamere tado mientras te meto a mi cama para q´ ,me cojas

    ResponderEliminar